miércoles, 9 de marzo de 2016

Tiempo de Prefijos


Es relativamente frecuente leer noticias como ésta de asociaciones y plataformas de pacientes reclamando  o esta otra en la que la cartera de servicios de un hospital se ve afectada por la fuga de especialistas.

Cualquiera interesado en la gestión sanitaria sabe de los problemas habituales que tienen los hospitales comarcales para competir con los grandes complejos universitarios en la captación y fidelización de especialistas donde el desarrollo y crecimiento profesional es relativamente más sencillo.

La explicación más habitual es hablar de precariedad, de contratos de mala calidad o de incentivos. 

Pero la realidad es que la fuga se produce porque el ambiente no es atractivo. A menos que se consiga crear un ambiente amable como el que tan bien explica Iñaki en esta entrada, el goteo de profesionales que se van tan pronto tienen una oportunidad es continuo e incesante.

Pero no solo lo dice Iñaki (para nosotros es suficiente que lo diga él) sino que también lo dice Don Berwick en esta videopresentación de un informe de The King´s Fund.


Para saber como evitarlo, lo prudente sería buscar, leer, informarse hasta llegar al concepto de Hospital Magnético. Más información sobre este concepto la podemos encontrar en esta entrada en Salud con Cosas o esta otra de Cuidando.es, dos blogs imprescindibles que han hablado de este concepto.

Contadas son las excepciones en las que un hospital consigue hacerse magnético y lo habitual es que se produzca justo lo contrario. Haciendo uso de la riqueza de nuestro castellano, le podríamos poner algunos prefijos a la palabra magnético para designarlos. 

De este modo nos encontremos hospitales a-magnéticos (que no son magnéticos), hospitales hipo-magnéticos (que son poco atrayentes) y, como alguno que conocemos, hospitales que se han convertido en lo contrario que deberían ser, sencillamente en anti-magnéticos.

Como dice este editorial de la revista Tesela que se titula como esta entrada, es el momento de analizar no sólo los problemas sino los meta-problemas (problemas que causan problemas) para pensar no sólo en soluciones sino en meta-soluciones (soluciones que permiten soluciones).

Y esto se deberá realizar desde un nuevo modelo de gestión, desde un nuevo liderazgo que tenga claro que lo importante no son los huevos sino las gallinas.

El gerencialismo ha fracasado.


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5 comentarios:

  1. Bonita meta-entrada de meta-blog. En un momentito, lectura y reflexión para un buen rato ;-) Personay story: Hace poco compartí blablacar con una profesora de cierta universidad de Barcelona que enseñaba calidad y gestión en una facultad de enfermería. No sabía lo que era un hospital magnético. No digo ná, y lo digo tó.

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  2. Muchas gracias compañero, podemos hacer un símil futbolistico y pensar como los equipos pequeños o medianos pueden retener a sus futbolistas ante el talonario de Madrid o BCN. Algunos lo consiguen, pero lo gran mayoría terminan claudicando.

    Otros equipos/hospitales ni siquiera son conscientes y por tanto, ni se preocupan de la alta rotación de sus profesionales.

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    1. Ay amigasho... el simil es acertadisimo. Es dificil competir salvo que consigas hacerte un huequito por cosas que no tienen que ver con el vil metal... ahí están tu Real y mi Athletic demostrando que se puede.

      Un abrazo.

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  3. Muchas gracias compañero, podemos hacer un símil futbolistico y pensar como los equipos pequeños o medianos pueden retener a sus futbolistas ante el talonario de Madrid o BCN. Algunos lo consiguen, pero lo gran mayoría terminan claudicando.

    Otros equipos/hospitales ni siquiera son conscientes y por tanto, ni se preocupan de la alta rotación de sus profesionales.

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